Gestión del Talento HumanoSAPIENSIA Y EXPERIENCIA

Mara Pérez… «Sin humildad, no hay crecimiento; es fundamental reconocer nuestras debilidades y aprender de los demás»

Gestión de Talento Humano – Habilidades – Liderazgo – Trabajo en equipo – Empatía – Crecimiento Profesional – Actitud Competitiva –

Mara Pérez, mexicana y reconocida a nivel latinoamericano como una de las principales expertas en gestión del talento humano, ha construido una carrera exitosa basada en principios sólidos y una evolución constante. Su trayectoria está marcada por el aprendizaje continuo, la empatía y la capacidad de inspirar a los demás. En esta entrevista, comparte las experiencias y lecciones que han definido su vida personal y profesional, ofreciendo una visión profunda sobre el liderazgo y la importancia de un enfoque consciente en la gestión de equipos.

Mara Pérez recuerda que sus primeros pasos en la gestión del talento humano estuvieron marcados por un enfoque erróneo hacia el liderazgo. Inicialmente, fue una jefa tradicional, centrada en los resultados y con una actitud competitiva. «Cuando empecé, me enfocaba en los resultados y era altamente competitiva, pero mis defectos personales me causaban sufrimiento al gestionar mi equipo», explica. Además, reconoce que su perfeccionismo e impaciencia dificultaban la relación con su equipo, lo que afectaba los resultados. «Era una jefa y no una líder», admite, y reflexiona: «Comprendí que, a menos que aprendiera nuevas habilidades y cambiara mi enfoque, no podría seguir creciendo profesionalmente.»

Era una jefa y no una líder. Comprendí que, a menos que aprendiera nuevas habilidades y cambiara mi enfoque, no podría seguir creciendo profesionalmente»

Con el tiempo, se dedicó a formarse en diversas áreas, lo que transformó tanto su vida personal como profesional. «Tomé cursos, diplomados, contraté coaches, y, como por arte de magia, dejé de sufrir; mis resultados empezaron a cambiar y alcancé logros que jamás hubiera imaginado», afirma. Mara destaca cómo su evolución personal fue clave para su éxito, indicando que «el mundo necesita más líderes que entiendan la gran responsabilidad que tenemos al gestionar equipos».

Para Mara, la humildad, la capacidad de aprender continuamente, la empatía y la escucha activa han sido esenciales en su carrera como líder. «Sin humildad, no hay crecimiento; es fundamental reconocer nuestras debilidades y aprender de los demás», asegura. También considera que la empatía y la apertura de mente le han permitido conectar mejor con sus equipos y generar ambientes de trabajo más positivos. «Escuchar activamente es clave para crear relaciones de confianza. Sin ella, es difícil empoderar a tu equipo», dice.

He aprendido que necesito estar bien para ser una buena influencia para mi familia, mis clientes y mi equipo.»

Estas cualidades le han permitido destacarse no solo en México, sino también en toda América Latina, donde es reconocida como una de las expertas más influyentes en el área de gestión del talento humano. «Siempre digo que, sin empatía, es imposible liderar; porque el liderazgo no se trata solo de alcanzar resultados, sino de impactar positivamente la vida de quienes te rodean», reflexiona Mara, subrayando el valor de un liderazgo basado en el respeto y el reconocimiento del potencial humano.

Uno de los hitos más importantes en su carrera fue la transformación de una Unión de Crédito en declive. «Me contrataron para dirigir una organización en crisis, y en solo un año logramos revertir la situación», comenta con orgullo. Mara detalla que la clave fue formar un equipo comprometido, empoderado y con una visión clara. «Conformar el equipo adecuado fue esencial; sin ellos, simplemente no hubiera alcanzado tantas satisfacciones», añade.

En un contexto donde los resultados no llegaban, Mara y su equipo lograron no solo estabilizar la organización, sino duplicar las utilidades en el segundo año. «El éxito no solo lo medimos en números, sino también en el bienestar del equipo. Todos estaban comprometidos y alineados con la nueva cultura de transparencia y rendición de cuentas», explica. Este logro no solo la hizo sentir orgullosa, sino que confirmó su creencia en el poder de un liderazgo bien enfocado: «Los resultados extraordinarios vienen cuando empoderamos a las personas correctas».

Todos merecemos una vida plena, y el primer paso es abrir nuestra conciencia.»

Mara siempre ha considerado vital mantener un equilibrio entre su vida personal y profesional. Para ella, esto comienza cada mañana con una rutina que incluye meditación, ejercicio y tiempo para el aprendizaje personal. «Es un no negociable para mí. He aprendido que necesito estar bien para ser una buena influencia para mi familia, mis clientes y mi equipo», asegura. Además, reconoce que el equilibrio es algo que debe trabajarse constantemente. «A veces, como mujeres con muchas responsabilidades, no podemos cumplir con todo, y eso está bien; lo importante es que la mayoría de los días logremos mantener ese balance», reflexiona.

Esta filosofía de vida le ha permitido manejar las demandas de su carrera con mayor serenidad, mientras sigue siendo una fuente de inspiración para quienes trabajan con ella. «El bienestar personal es crucial para el éxito profesional; si no estamos bien, no podemos dar lo mejor de nosotros a los demás», afirma, subrayando la importancia de cuidar de uno mismo para poder cuidar de los demás.

Aprendí que la vida es efímera, que todos somos vulnerables y que, si no disfrutamos, el tiempo pasa de todas formas»

A lo largo de su carrera, Mara ha encontrado inspiración en diversas personas, desde escritores hasta deportistas de alto rendimiento. «Me inspiran los deportistas de alto rendimiento, porque son un ejemplo de dedicación y mentalidad. No solo desarrollan habilidades técnicas, sino también la mentalidad necesaria para alcanzar niveles competitivos», comparte. Sin embargo, su mayor mentor en la vida siempre ha sido su padre. «Mi padre ha sido mi mentor más grande, especialmente en el ámbito personal», confiesa, recordando la influencia que tuvo en su desarrollo personal y profesional.

Además, Mara ha aprendido tanto de jefes buenos como malos, quienes le enseñaron lecciones valiosas. «Contraté coaches y terapeutas en diferentes etapas de mi vida, porque nadie es experto en todo y todos necesitamos ayuda en algún momento», destaca, subrayando la importancia de buscar apoyo externo cuando es necesario.

Uno de los eventos que más impactó a Mara fue su diagnóstico de cáncer de mama a los 46 años. Esta experiencia transformó su perspectiva sobre la vida y el trabajo. «Aprendí que la vida es efímera, que todos somos vulnerables y que, si no disfrutamos, el tiempo pasa de todas formas», relata. Esta lección ha influido profundamente en su forma de liderar y vivir. «Ahora trato de estar más presente, tanto para mí como para los que me rodean», añade, explicando cómo la experiencia la ha impulsado a disfrutar cada día y a vivir de manera más consciente.

Sin humildad, no hay crecimiento; es fundamental reconocer nuestras debilidades y aprender de los demás»

Mara aspira a dejar un legado basado en la conciencia y la plenitud. Cada día se siente impulsada por la idea de ayudar a las personas a ampliar su conciencia y superar sus limitaciones. «Lo que me mueve es que las personas amplíen su conciencia, gestionen sus miedos y alcancen una vida plena», explica. Esta convicción la motiva a seguir compartiendo su experiencia y conocimientos con otros. «Todos merecemos una vida plena, y el primer paso es abrir nuestra conciencia», subraya, reiterando su compromiso con el crecimiento personal y el bienestar de quienes lidera.

Mara Pérez, líder en la gestión del talento humano, ha recorrido un camino marcado por el aprendizaje continuo y el compromiso con el bienestar de su equipo y de sí misma. Su enfoque en la empatía, el empoderamiento y el equilibrio personal ha sido clave en su éxito profesional y su reconocimiento a nivel latinoamericano. A través de sus enseñanzas y experiencias, inspira a otros a liderar con integridad, humildad y un profundo sentido de responsabilidad. «Todos podemos ser líderes excepcionales si estamos dispuestos a abrir nuestra mente y aprender de los desafíos que la vida nos presenta», concluye.

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