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La minería en un momento crítico, exportaciones caen en 43,9%

La minería se ve afectada debido a que las exportaciones en ocho meses cayeron un 43,9 %, alcanzando un valor de 817,7 millones de dólares producto de paralización de las principales por la pandemia provocada por el coronavirus y otros factores.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), las ventas de zinc cayeron en 50,7% y sumaron 463 millones de dólares; las de plata bajaron en 28,9% y llegan a 237,5 millones de dólares; las de plomo disminuyeron en 48,1%,  alcanzan 62,5 millones de dólares; y  las de estaño apenas suman 0,9 millones de dólares.

Las exportaciones de estaño metálico totalizan 103,9 millones de dólares, pero igual cayeron en 47,6% respecto a agosto del año pasado. Las ventas de oro metálico llegan a 689,3 millones de dólares, cifra menor en 36,6% respecto a 2019. 
  
Héctor Córdova, expresidente de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol, explicó que uno de los factores tiene que ver con la paralización de las operaciones de la mina San Cristóbal que es la que más produce zinc, plata y plomo. 

“Si la operación minera más importante del país en la actualidad deja de operar, más del 25% de la producción de minerales desaparece”, añadió que las operaciones se han normalizado a media máquina desde mediados de septiembre, pero con mucha gente aun desarrollando tareas vía teletrabajo.

La producción de estaño está concentrada en Huanuni, Colquiri y cooperativas, pero las minas también estuvieron paralizadas por la pandemia. Tampoco estuvo operando la fundición de Vinto. “Lo más grave es que los trabajadores de Huanuni y Colquiri han decidido no entregar concentrados a Vinto, que tiene problemas de liquidez para pagar. Por eso no hay producción de estaño y no se está fundiendo nada, hemos retrocedido 70 años”, lamentó.

Huanuni emplea actualmente a 3.000 trabajadores que en promedio ganan 2.000 dólares y su sostenibilidad depende de un nuevo ingenio que está listo para funcionar desde hace cinco años.  “El problema es que cuando comience a funcionar muchos perderán algunos privilegios, ya que ganan mucha plata. Como los trabajadores dirigen, son ellos los que deben poner en marcha el nuevo ingenio. No puede ser que por beneficio de unos cuantos toda la empresa esté en riesgo de quiebra”, advirtió.

Explicó que con los protocolos de bioseguridad las diferentes minas pueden volver a operar como en otros países, más aún ahora que hay una recuperación de los precios internacionales.

“La demanda es alta, la cotización de oro batió récord, plata está con un buen nivel, el estaño está en ocho dólares y el zinc que en marzo cayó a 0,80 dólares, ahora está en 1,10 a 1,12 dólares”, dijo.

Dionisio Garzón, exministro de Minería, explicó que la pandemia afectó a la producción de minerales, pero el otro problema es que las pocas minas importantes como San Cristóbal, San Vicente, San Bartolomé, Bolívar, están comenzando a declinar. “San Cristóbal tuvo que parar por la Covid-19 y eso impactará en la producción, pero ya está con los protocolos para operar. San Bartolomé y San Vicente están en los últimos años de producción”, puntualizó.

Según Garzón, actualmente hay un solo proyecto importante en carrera y de relativa talla mundial que es el de New Pacific Metals Corp que se llama Silver Sand para explotar plata cerca de Betanzos en Potosí,  pero  demandará  tres años su  cristalización, pero ha tenido problemas con las cooperativas. Respecto a Huanuni, el experto considera que se trata de una mina muy antigua y con una profundidad al límite y pasará a una fase de explotación de zinc, plomo y cobre, pero con mayores costos de tratamiento y transporte.

Marco Belmonte/ La Paz

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