En 2023 desciende la actividad económica industrial
La Cámara Nacional de Industrias (CNI), en su Informe Anual de Evaluación de la Industria, señala que en 2023 se estima un crecimiento del PIB industrial inferior al 2%, cuando en 2022 se registró un crecimiento de 2,2% y en 2021 de 3,9%. Se trata de un descenso en el ritmo de actividad económica industrial en 2023 a consecuencia de factores internacionales y nacionales. Recién después de tres años se alcanzó el mismo nivel del PIB industrial de la prepandemia de la Covid-19.
El descenso de la actividad económica del sector industrial se refleja en los siguientes indicadores:
1. Los créditos de la banca múltiple al sector industrial cayeron 1,4% a septiembre de 2023 respecto de similar periodo de 2022.
2. La participación del número de industrias respecto del total de empresas en el padrón del SEPREC se estancó en 10,5% a octubre de 2023, llegando a 39.439 industrias.
3. Las exportaciones industriales cayeron 22% a septiembre de 2023, sumando $us 4.302 millones.
4. Las importaciones industriales descendieron 4,9% a septiembre de 2023, llegando a $us 3.036 millones.
5. Las importaciones de materias primas e insumos intermedios industriales bajaron 12,2% a septiembre de 2023.
6. Sin embargo, las importaciones de bienes de consumo no duradero industrial (alimentos, bebidas, textiles, muebles, etc.) subieron 3% a septiembre de 2023 que es reflejo también del incremento del contrabando. La importación de bienes industriales sube y la producción nacional baja.
A nivel internacional, los factores que explican el descenso en el crecimiento económico industrial están relacionados con el encarecimiento de los costos de materias primas, insumos intermedios y bienes de capital industrial importados. El encarecimiento de costos industriales es producto de la persistente crisis de suministros y logística internacional desde los puertos de Asia a América, la guerra entre Rusia y Ucrania, la conflictividad bélica en Israel y Palestina, el paro fronterizo de 100 días en Perú, la estanflación en Estados Unidos y Europa y la menor actividad económica de China.
A nivel nacional, el descenso en la demanda de bienes industriales nacionales es producto del incremento del contrabando y la informalidad que superó los $us 3.300 millones, la escasez de divisas y los costos de transacción financiero asociados a la misma para realizar importaciones, la escasez de diesel y gasolina para producir y fundamentalmente por los más de 150 días de bloqueos en las diferentes carreteras del país que afectan no sólo a la industria, sino al consumidor final y a Bolivia en su conjunto.
El sector industrial en este contexto adverso, en 2023 continuó proveyendo a las familias bolivianas bienes manufacturados de calidad, a precios competitivos, manteniendo las fuentes de empleo y aportando con sus impuestos al Estado.
Apertura del diálogo
En el contexto de descenso de la actividad económica industrial, en 2023 se inició un proceso de apertura y diálogo con el sector público. El 16 de noviembre de este año, la CNI en su Consejo de Presidentes del Sector Industrial, recibió al Presidente del Estado Plurinacional, Luis Arce Catacora.
Los industriales consideramos positivo el acercamiento del Pdte. Arce con nuestro sector. El primer mandatario nos explicó en detalle la Política de Industrialización vía Sustitución de Importaciones.
El sector industrial hizo conocer al Presidente propuestas para impulsar al sector industrial y así superar el actual 16% de participación histórica en el PIB nacional. Producto de la visita presidencial se logró el anunció de la REACTIVACIÓN del Consejo Nacional de Lucha Contrabando como instancia pública y privada para combatir este ilícito; Se expresó el enfoque de COMPLEMENTARIEDAD entre el sector público y privado para impulsar la Política de Industrialización vía Sustitución de Importaciones; Se destacó la importancia y relevancia de trabajar de manera conjunta en la DESBUROCRATIZACIÓN y la DIGITALIZACIÓN del sector público, en especial del SENASAG, además de la necesidad de CONFORMAR COMISIONES DE TRABAJO con los Ministerios para tratar temas que preocupan a la industria, como ser Aduana, Finanzas, Salud, Impuestos, Ley de Inversiones, entre otros. La CNI, es proactiva y tiene propuestas específicas sobre estos temas.
Retos y desafíos
Entre los retos y desafíos, consideramos necesario promover un entorno propicio para la inversión privada nacional y extranjera. Se requiere de seguridad jurídica y estabilidad económica para promover la iniciativa privada.
En este contexto de necesidad de promover un entorno propicio para la inversión planteamos pertinente:
– Concretar el negocio del litio por sus efectos multiplicadores sobre la industria y el comercio. Una adecuada gestión del litio permitirá a Bolivia ingresar a un nuevo ciclo de crecimiento que reditúe en mayor actividad económica para todos los sectores.
– Modernizar las normas vinculadas a la inversión privada, es el caso del Código Tributario, la Ley 843 de Impuestos Nacionales y la Ley General del Trabajo que deben adecuarse a la nueva normalidad que se vive con el avance tecnológico.
– Ajustar la Ley de Inversiones y la Ley Financial 2024 que señalan la posibilidad de realizar inversiones conjuntas entre públicos y privados mediante la conformación de sociedades anónimas mixtas (SAM); sin embargo, nos preocupa que la administración de las SAM sea estatal.
– Mejorar la logística y transporte para las exportaciones bolivianas. Bolivia registra los costos más altos de logística y transporte de la región sudamericana.
– En materia tributaria se debe recuperar el espíritu de la Ley 843 y universalizar el pago de impuestos. El trato impositivo diferencial entre sectores está generando distorsiones. Asimismo, se necesita ampliar la base tributaria.
– Exigimos al Gobierno se respete el Estado de Derecho para que los bloqueos no perjudiquen a la industria y a la economía en su conjunto.
El 2024 es clave para reactivar la economía nacional y para este propósito, el enfoque de alianza público – privado es indispensable. Los desafíos del próximo año serán superados sólo con un enfoque de coordinación entre el Gobierno y el sector privado.
Finalmente, expresamos nuestra vocación de diálogo permanente con el sector público a nivel nacional y subnacional para tratar, analizar y proponer temas conducentes a la reactivación económica y al desarrollo nacional.