Guía para visitar Santiago de Chiquitos
Desde la plaza de Roboré hay micros que salen hacia Santiago de Chiquitos sólo tenéis que preguntar a qué hora pasan Salen cuando están llenos. Tardareis media hora en recorrer los 23km. Cuesta 10 Bolivianos por persona.
¿Qué ver en Santiago de Chiquitos?
La cueva de miserandino
Hay una Cueva preciosa que espera que la descubra. Esta es una excursión que se inicia desde el pueblo de Santiago de Chiquitos y se realiza en su totalidad a pie. Toda la información se puede conseguir hablando con el dueño de algún alojamiento.
Por el camino verás otro de lo atractivos de la zona: El Arco. El Arco es una formación de piedra en forma de arco como su nombre indica.
Después de pasar el arco aún tendrás que caminar más para llegar hasta la Cueva de Miserandino, lo primero que veras es una cueva entre la roca con una cruz en medio. Ahí fue donde estuvo viviendo el misionero.
La cueva no está señalizada, por eso es importante el gps. Tienes que ir mirando para encontrarla. Una vez allí, cruzas por un túnel de piedra y llegas al paraíso. ¡Espectacular!
La excursión vale la pena, no sólo por la Cueva sino por el camino en sí mismo. Pasaras por dos ecosistemas: la sabana y el bosque subtropical. Vas caminando tan tranquilo por la sabana y tras un poco de pendiente ya estás en el bosque subtropical sin darte cuenta rodeado de una vegetación mucho más densa dónde incluso en la zona de la cueva hay río y cascada al lado de las cuáles se encuentra un bosque de helechos gigantes de menor dimensión que el del parque amboró en Samaipata.
El mirador de Tucavaca
Una de las ventajas de levantarse temprano es que el día alcanza para mucho. Luego de visitar la Cueva de Miserandino te dará el tiempo para ir al Mirador de Tucavaca.
Si eres extranjero pagaras 20 bolivianos por persona que cuesta la entrada para los nacionales es la mitad empezamos a recorrer el camino hacia arriba para llegar al primero de los miradores, el mirador pequeño, luego continuaras hacia arriba para llegar al segundo mirador des de el que se aprecian las formas rocosas.