El Billetaje electrónico en el transporte público en Bolivia: avances y retos aún por superar
En nuestro país el recaudo electrónico de pasajes se implementó inicialmente en Mi Teleférico y el Puma Katari. Sin embargo, dada la masificación de operadores de transporte, el crecimiento de la población y las rutas; el uso de nuevas tecnologías se convierte en una necesidad latente en el usuario.
Bolivia tuvo enormes desafíos y avances en cuanto al billetaje electrónico de transporte público, los mejores ejemplos son Mi Teleférico y los buses Puma Katari y ahora el reto es llevar todo este avance hacia un modelo de Movilidad como Servicio; cuyo objetivo es combinar los servicios de los proveedores de transporte a través de un portal unificado que gestione el viaje y el usuario pueda realizar un solo pago por toda su ruta.
Mejorar la experiencia del pasajero significa brindarles más y mejores beneficios, ya que los operadores de transporte se incrementaron, así como la población y sus rutas. Sin embargo, una cosa permanece constante: la necesidad de una movilidad confiable, segura y accesible en las ciudades.
“Es innegable que la tecnología centrada en la movilidad como servicio en Bolivia juega un papel imprescindible para generar impacto en la vida de las personas, toda vez que ayuda a satisfacer las necesidades de transporte y conectividad. Poner al pasajero en el centro de la innovación en movilidad, como lo hizo Mi Teleférico y el Puma Katari, ha demostrado ser la forma más exitosa de mejorar la experiencia del usuario”, asegura Eduardo Aranda, director ejecutivo de Síntesis, la empresa que participó en la implementación del sistema de billetaje electrónico en Mi Teleférico, tanto en software como en hardware.
Hitos de Movilidad cómo servicio en Bolivia
Desde mayo de 2014 Mi Teleférico, cuenta con una plataforma de billetaje electrónico que Síntesis desarrolló exclusivamente para la empresa pública dependiente del Ministerio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, que incluye soluciones software integradas al hardware de control de accesos, que contemplan módulos de gestión de tarjetas inteligentes, gestión de tarifas, facturación, gestión de usuarios, operadores, puntos de venta, dispositivos de control de acceso y reportes financieros.
En cuanto a la infraestructura de equipos, Mi Teleférico cuenta con dispositivos de control de acceso que permiten la lectura de tarjetas sin contacto y tickets con códigos QR, además de máquinas de autoservicio para venta, recarga y consulta de saldo de tarjetas.
Gracias a la combinación de un nuevo esquema de servicio soportado en estas soluciones tecnológicas, en diciembre de 2019 Mi Teleférico registró 10.324.233 pases entre tarjetas sin contacto y tickets con códigos QR, y tuvo 3.038.353 transacciones por un valor de Bs. 21.910.490,00.
“Mi Teleférico me ayudó a transportarme de un lugar a otro sin trancaderas, en un espacio cómodo, y algo que valoro mucho es poder recargar mi tarjeta y usarla en cualquier momento sin necesidad de usar efectivo. Ya no necesito preocuparme por tener “sueltos” o manipular monedas” sonríe mientras relata Mónica Moscoso, una pasajera de Mi Teleférico.
La visión a futuro es lograr la interoperabilidad entre los operadores de transporte para permitir a las personas pagar todo su viaje con una misma herramienta e interconectar las rutas y los operadores. Síntesis apuesta firmemente a esto, su plataforma ha sido creada con este fin y espera en el corto plazo ser la carretera sobre la cual fluya esta interoperabilidad.
Obstáculos a los que nos enfrenta Bolivia en cuanto a Movilidad como Transporte
Bolivia paulatinamente apuesta por modernizar e innovar para mejorar el sistema urbano de transporte, sin embargo, aún se enfrenta ante un sistema de transporte público planificado en la década de los 80, organizado por sindicatos o cooperativas de transporte, los cuales a la fecha no han sido modernizado en su estructura operativa. El servicio de transporte público y privado en el país continúa con el cobro de pasajes en efectivo, los operadores de transporte se mantienen escépticos a nuevas alternativas de pago digitales, es decir al recaudo del servicio.
Sin embargo, las experiencias de billetaje electrónico y calidad de los servicios de Mi Teleférico y La Paz Bus, están generando un cambio de visión en los operadores de transporte que están interesados en el uso de nuevas tecnologías para mejorar sus ingresos y tener el control adecuado del servicio que brindan.
“Un ejemplo de esto es el servicio que la operadora de recaudo desarrolló en Santa Cruz con instalación de validadores de tarifa, uso de tarjetas sin contacto y aplicación móvil en la nueva flota de buses de la línea 121, demostración que tuvo aceptación de los socios de dicha línea de buses”, señala Aranda.
Por tanto, el desafío que el país tiene es la innovación tecnológica del sistema de transporte, brindar a los bolivianos diversos medios de pago no sólo en efectivo sino también digitales, que sean seguros y amigables, como aplicaciones móviles que les permita utilizar su Smartphone como una tarjeta virtual para acceder a las diferentes opciones de transporte.
El objetivo final es lograr que el sistema de transporte sea interoperable para todos los actores del ecosistema de transporte y movilidad urbana, integrando operadores y terminales de transporte, rutas y tarifas, para todos los bolivianos usando la tecnología como facilitador para este objetivo.
“Bajo esta premisa, estamos diseñando proyectos para el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz, La Paz Bus, para que los bolivianos podamos contar con soluciones integrales de movilidad enfocadas en plataformas digitales con sistemas de pago modernos, con dispositivos que permitan el registro de los accesos, monitoreo de las rutas, pero sobre todo sean interoperables, es decir que la población pueda combinar las distintas opciones de transporte de un solo lugar como una super app que le permita programar y pagar sus viajes”, finalizó el ejecutivo.